Cuántas veces habré contemplado el barrio desde mi cama, tumbada, sin nada que hacer. Miraba a los edificios, (bueno... "Fincas") imaginando mi futuro, no muy lejos de Extramurs. Siempre me gustó mucho esa zona porque podía ir andando a casi todos los sitios que me importaban. Hubo una vez que tuve la seguridad que viviría en el mismo barrio de siempre, que tendría los mismos amigos toda la vida, y que bebería en los mismos bares. Qué ingenua. Por aquel entonces aún no sabía que mi hogar iba a estar a 3 horas en tren, y que iba a necesitar google maps para ir a trabajar, pero tampoco sabía que me iba a enamorar de una americano, ni que iba a tener mi propia casa en Barcelona, con vistas a la Sagrada Familia. Al final te das cuenta, que por mucho que vivas, la experiencia no es más que eso, y que por mucho que pienses que lo sabes todo, y te hagas una hoja de ruta de tu vida, las cosas pasan, con o sin razón y no te quedan más ovarios que improvisar. Suena divertido y emocionante, pero francamente, a veces me parece un coñazo. 

Hace años que dejé de imaginarme mi vida, simplemente me he dedicado un poco a verla venir sin mucha preocupación, dejando que las cosas sucedan, aunque reconozco que este 2017 ha sido el típico año que no sabría definir con exactitud. Pero lejos de dar una valoración como si esto fuera OT, el final es lo que cuenta, y reconozco que no tengo ningún derecho a quejarme, aunque si esto me pilla con 5 años menos, estaría lloriqueando, fijo.
Como decía en el anterior post, la vida te da y te quita, a veces a partes iguales, y a veces no, pero oye, hay que saber encajar los golpes y seguir. En menos de dos años he cambiado de ciudad, de trabajo, me he hecho siete mudanzas, y he renunciado a muchas cosas, pero...oye, hoy respiro. Eso es lo que cuenta. Lo que tenga que venir, vendrá, de eso no se libra nadie.

A veces leo post antiguos y flipo. Flipo viendo como es capaz de evolucionar una persona. De como he pensado toda mi vida con el corazón y he podido obviar algo tan importante como la cabeza. Pero nunca es tarde. Nunca es tarde para nada. Eso es algo que no deberíamos olvidar. La edad aprieta, pero no ahoga. Nunca olvidéis esto. Nunca os conforméis. Nunca digáis: "Bueno, pues ya lo tengo todo hecho". Vamos a vivir a tope, pero sin amnesia. Vamos a vivir, pero sin nostalgia.  

Hace unos días leí mi Horóscopo chino, y decía algo así como que 2018 iba a ser un año de pocos cambios. Jo-der. Gracias. GRACIAS. Si el año que viene no me llevo ninguna sorpresa, no pasaría nada. Perfil bajo total. En serio. 

¿Y que puedo decir más de 2017? He comido muchas albóndigas del Ikea. He viajado a Berlín. He escuchado Mala Mujer de C.Tangana dos millones de veces. He ido al cine sola. Me he arruinado con la fianza de mi piso. He valorado mucho a mi familia. Los quiero, joder. Me he dado cuenta que mi casa está donde tenga Internet, que las redes sociales son un escaparate del cual no sé si quiero formar parte ya. Que una buena Mostera en casa, viste mucho. He hecho del "Hasta luego Mari Carmen" mi modo de vida. He vuelto a decir Ché Nano, para reivindicar mi origen valenciano en Lo Catalunya. He empezado a mirar las etiquetas de la ropa para ver de qué están hechas. He dejado de ser Stalker. Tres cojones me importa la vida de los demás. La verdad. Me he puesto al día en el mercado inmobiliario de Barcelona. Como sushi. Soy la puta ama con los palillos. Yo que sé. He aprendido que hacerse viejo es LA VIDA. He pedido 48 veces en Just Eat. Si tuviera que decir algo de este 2017, sería:

CON DOS COJONES Y UN PALO. 

Este también ha sido el año en el que he cumplido 33. Que fuerte. Yo, 33. No he vivido poco. Ni mal. Nadie me va a quitar lo vivido. Ni lo bailado, ya os lo digo....

"¡Pero si no tienes hijos! ¡Pero si no estás casada!" dirán algunos. Yo digo:

Ni falta que hace. La vida me tiene preparado algo más grande. Ya lo veréis. Que a lo mejor luego se queda en un par de gatos, pero eh, que no me señalen por cobarde. La vida no se acaba en eso. La vida es más, y quien no sepa verlo, be water my friend. Y no me cansaré de decir: "Tu tienes vida? Pues vive tu vida, o cómprate una vida" como bien dice la Pantoja; Vive tu vida a través de ti, de nadie más.


En fín, despido este año, suspirando aliviada y satisfecha por haber hecho bien mi parte, por haber gestionado todo de puta madre, y sobretodo por aprender un par de lecciones útiles en la vida:

No des nada por hecho.
Ante todo, vive ahora.





Con todo el amor del mundo,

La Marabunta

Comentarios

Entradas populares