QUÉ NIÑOS ESTAMOS CRIANDO...





Mi madre, nacida en una familia acomodada, nunca quiso estudiar, al contrario de sus tres hermanos. Trabajó desde muy joven como dependienta en una pastelería de renombre, donde el dueño le hacía mobbing, al que muchos años más tarde llevó a juicio y ganó. Mi madré dejó de trabajar cuando yo tenía unos ocho años, para dedicarse a su casa y a su familia. De esa época, recuerdo pasar mucho tiempo con mi padre, quien me paseaba los domingos mientras mi madre trabajaba todo el finde. Íbamos al cine, me compraba libros, me hacía la comida, fueron unos años muy felices, como toda mi infancia.

Siempre he visto a mi madre como una trabajadora. Que no sólo cuidaba de mi padre y de mí, sino también de mi abuelo, que lamentablemente murió a causa del Alzheimer y que por desgracia vivió esta dura enfermedad durante veinte años.
Mi abuela, madre de cuatro hijos, nunca salió de su casa. Nunca viajó. Nunca vió mundo, eran otros tiempos diréis; Si, si que lo eran. Hoy, aún existen mujeres así. Mujeres que viven por y para sus familias. Mujeres a las que nunca nadie les va a dar las gracias. Y aún hay personas que cuestionan el feminismo.
Mi madré no sólo cuidó de mi abuelo, sino también de su madre, que varios años después del fallecimiento de su marido, enfermó exactamente de lo mismo. Seguramente por mi edad, una edad en la que era plenamente consciente de todo, esos diez años fueron los peores de mi vida. Ver como mi abuela se apagaba lentamente, como la vida se había esfumado pagándole de esa manera. Mi madre dormía muchas noches en casa de mis abuelos, y a la mañana siguiente llegaba a casa realmente reventada, esa fué la realidad durante una época. He crecido viendo como mi padre cuidaba de mi madre. Como llegaba de trabajar, y no se sentaba en el sofá esperando la servidumbre de mi madre, sino yendo a la cocina a prepararnos la cena. 

Me pregunto, qué clase de niños estamos criando. Bueno, está criando la gente. Niños que ven como su abuela es esclava. Niños que ven cómo su abuela y su madre están en la cocina, mientras los hombres fuman en el balcón, ven los deportes, y dejan su culo clavado en el sofá. No vaya a ser que su masculinidad quede en evidencia porque pongan la mesa, o ayuden en algo. 

¿Cómo estamos educando a nuestros niños? PREGUNTO.

Si los niños son el futuro, qué futuro nos espera cuando a día de hoy, sigue habiendo comportamientos machistas tan aceptados?

Ser madre no te convierte en buena madre, te convierte solamente en eso, en madre. Una cosa tengo clara, si algún día decido serlo, siempre será bajo la responsabilidad que supone educar para que ese niño sea la mejor persona posible. Un niño que no diferencie entre sexos, que aprenda a respetar por encima de cualquier cosa. Intentaré darle una educación libre de prejuicios y tintes machistas, donde la igualdad siempre esté presente. Quiero poder mirar a esa persona, y sentir que la sociedad tiene mucha suerte. No quiero traer al mundo a un tirano. 

Y la diferencia entre un tirano, y una persona increíble, es 'solamente' la educación.



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